(#66) Debió Haberme Parecido

Debió haberme parecido
(por Emilio Luzbel)

Siempre supe decir las cosas en el momento indebido. No lo considero un talento ni un rasgo distintivo porque por eso no supe quererte y ahora no aprendo a ser tu amigo. Pensé que había sangrado todas mis ganas de verte pero me guardé unos cuantos ladridos. Y me acuerdo recién ahora que olvidarte no es pan comido. Quisiera ir a buscarte pero entre días, años y meses algo he aprendido. Donde no tenía nada una conciencia ha crecido. Me pregunto cómo recuperarte si todo está perdido. El tiempo fue inclemente y me dio mi merecido. Creí por un momento que volvías, debió haberme parecido. Quizás quedaba algo en pie de lo que habíamos construido. Creía que te apartabas de tu camino elegido, y volvías a apiadarte de este noble empobrecido. Vi algún reflejo en tus palabras, o debió haberme parecido. No creo sin embargo que nada hayas sentido. Seguramente te preguntabas adonde me había metido, y cuando me viste aparecer algo en tu mundo se habrá movido. Tu cabeza también debe haber vuelto a nuestros lugares preferidos, y me animo a aventurar que para tus adentros has sonreído. O quizás lo imaginé todo, y debió haberme parecido. Pero seguro guardas mis letras en un placar bien escondido y cuando lees lo que lloran siguen teniendo sentido. ¿Podes decir a ciencia cierta si lo que sentiste se ha extinguido? Es difícil notar un gigante dormido, siempre se las arreglan para pasar desapercibidos. Pero no te inquietes demasiado, son solo sueños míos. Lo más probable es que nada haya sucedido. Debió haberme parecido.

11/6/08